Érase una vez una
ciudad oscura, sucia y humeante…
Abro los ojos y veo a Alfred sacudiéndome el
brazo para despertarme, hacía meses que no era necesario que me despertara...
Era hora de enfundarse el traje y de dirigirme al piso del Sr. Earle. Después
de unos minutos revisando carpetas, archivos… encuentro algo curioso, una carta
del departamento judicial de Gotham, debe presentarse en unos días en los juzgados
provinciales por un delito contra el medio ambiente y por cohecho. Por aquí no
encuentro mucho más, procuro dejarlo todo como estaba y salgo del edificio.
Tengo que informarme sobre el caso para
poder empezar a atar cabos, de momento todo lo que tengo son “fragmentos de un
todo”. Llamo al inspector Gordon para que me facilite todos los informes sobre
el caso, Harvey Dent, fiscal del distrito y amigo de Gordon también me ayudará.
Me reúno con ellos en la azotea de la comisaría de la policía de Gotham donde
Jim (el inspector Gordon) aprovecha para fumarse uno de sus cigarrillos. Me entero
de que Dent, fiscal encargado del caso de Earle, fue el encargado de reabrir el
caso tras muchos años a causa de que había un nuevo testigo y qué testigo… (ya
os contaré). Había trabajado con Dent hacía unos meses, era un tipo peculiar
pero un buen hombre al fin y al cabo. Tenía las ideas claras y quería lo mismo
que yo, el bienestar de la ciudad, aunque su filosofía para arreglar las cosas
era un tanto idealista y en ocasiones llegaba a ser obsesiva.
Al parecer Earle fue denunciado por Jerome
Bryant, un empresario que le acusó de verter residuos tóxicos derivados de la producción de armas
químicas en unos terrenos de su propiedad situados a las afueras de la ciudad
que estaban pendientes de ser edificados. La política de mi compañía sobre ese
tema era muy clara, los residuos debían de ser reciclados a través de una
empresa especializada a la que le pagábamos una buena suma de dinero, pero en
lugar de hacerlo así le encargó el trabajo a Falcone que los esparció en los
terrenos del Sr. Bryant destrozándoselos e imposibilitando cualquier
construcción a medio plazo. De esta manera Earle se quedó con el dinero que se
ahorró al encargarle el trabajo a Falcone en lugar de a la empresa determinada.
El citado empresario le pidió a Earle que le pagara una indemnización por los
daños ocasionados y le amenazó con denunciarlo si no lo hacía. Earle sabía
perfectamente que si le denunciaba ante los tribunales tendría que pasar una
larga temporada en la cárcel, perdería el trabajo y una importante suma de
dinero. Finalmente, Jerome Bryant interpuso una demanda en los juzgados de
Gotham contra William Earle que seguía defendiendo su inocencia mientras el
empresario aseguraba tener pruebas suficientes para hacer que ingresara en
prisión.
El empresario, que a su vez era abogado, decidió defenderse a sí mismo
en el juicio, ese fue su gran error. El día del dictamen Bryant no se presentó
y el juicio quedó suspendido. A la mañana siguiente apareció su cuerpo inerte sin
vida en la cuenca del rio Gotham desapareciendo con él todas las pruebas contra
William Earle. El forense determinó que había sido asesinado de un disparo en
la sien y que había sido lanzado al rio horas antes de que se celebrase la
vista. La policía investigó el homicidio teniendo a Earle en el punto de mira
pero nunca se encontraron pruebas para inculparle. El juez instructor decidió
cerrar el caso dejando al acusado en libertad sin cargos obviando las pruebas
existentes como los terrenos contaminados del empresario asesinado. Hace unas
semanas ese mismo juez, el Sr. Faden, fue
detenido por aceptar sobornos en distintas ocasiones que habían influido en sus
decisiones judiciales. Dent, que también era el fiscal encargado de este caso,
había llegado a un acuerdo con el juez Faden, el acusado. Si confesaba en qué
casos había practicado cohecho se le rebajaría la pena. Confesó que Earle le
había pagado para lo dejase en libertad gracias a la sentencia. Automáticamente Dent decidió reabrir
el caso. El asesinato de Bryant y la amistad de Earle con Falcone, que cada vez
era más evidente, hicieron que se sospechara que alguno de los sicarios de
Falcone fuera el homicida.
Finalmente, el apoyo de Earle a Falcone en la posible apertura del parque de
residuos tóxicos y su implicación en el caso de Jerome Bryant hizo que la
cúpula de Empresas Wayne decidiera relevarle de su puesto de director de
Industria Wayne para reubicarlo en un cargo inferior de operario de “Wayne Technologies. Todo esto nos lleva al presente.
Los maletines que recibió Grapa en nombre de Falcone tienen
que tener alguna relación con todo esto. ¿Intentaría asesinar al juez Faden,
sobornar de nuevo al juez encargado del caso o probaría algo distinto? No voy a
conseguir que Earle confiese, ha escondido la verdad demasiados años como para
derrumbarse en un interrogatorio. El juicio es mañana y tenemos que estar
preparados. Primeramente, hay que asegurarse de que Faden esté bien protegido,
le pido a Gordon que aumente la vigilancia en las inmediaciones de su celda.
Harvey ha investigado al juez encargado del caso y confía en él no aceptará
sobornos, es un hombre de principios. Si el juicio se celebra sin altercados
Earle irá a prisión y todo acabará todo lo bien que se puede esperar. Por
tanto, el día del juicio tendré que estar presente para vigilar que ningún
sicario de Falcone asesine al testigo.
Hoy es el gran día, Gordon tiene el operativo organizado, sus
hombres están listos para actuar, el testigo corrupto está a salvo, Dent está listo para
mandar a Earle a Blackgate y yo... Soy
Batman, siempre estoy preparado. Alfred tiene pinchadas todas las cámaras
de alrededor y todas las personas del juicio están registradas. Todo va muy
bien, demasiado y tan sólo quedan 15 minutos para el juicio.
Está a punto de dar comienzo cuando Alfred me notifica por el
pinganillo de que el Ford Escort negro de Grapa se aproxima al juzgado por la
calle 32. Aviso a Gordon y automáticamente envía dos patrullas para
neutralizarles. Consiguen detener el vehículo que no opone resistencia, la
sorpresa de los policías al acercarse al vehículo es mayúscula, no son ni Grapa
ni los hombres de Falcone. El conductor explica a los agentes que un tipo con acento italiano
le había pagado 200 dólares para que llevara el coche hasta el juzgado. Era un
señuelo, Grapa estaba jugando con nosotros. Lo más probable es que en cualquier
momento los delincuentes aparezcan en el juzgado. Me dirijo de nuevo hacia allí
y así es, un francotirador está apuntando desde el edificio del frente a la
sala en la que se celebra el juicio. Por suerte, llego antes de que efectué el
disparo, logro detenerlo pero no consigo evitar que se lance al vacío a través
de la ventana, no llego a detenerlo, muere al impactar contra el suelo.
El juicio se celebra con normalidad y Dent cumple su palabra,
el juez dicta sentencia, el testimonio de Faden fue más que suficiente para
encerrar a William Earle en Blackgate. La historia acabó bien, conseguimos que
se hiciera justicia y honrar la memoria del difunto Jerome Bryant, lástima que
no pudimos atrapar con vida al tirador. Si no se hubiera suicidado podría haber
delatado a Falcone de alguna manera.
¿Cómo es posible que Falcone haya conseguido tener hombres tan leales capaces
de suicidarse antes de ser atrapados para evitar delatarle? Quizá no lo hizo
por eso y sólo quiso evitar la cárcel… A la mañana siguiente el forense ya
tenía preparado el papeleo de la autopsia. Obviamente no era muy completa
debido al mal estado del cuerpo al caer desde un edificio de 70 metros pero la
información que pude extraer fue aterradora. En los análisis sanguíneos se
encontró una sustancia que le había hecho cambiar su forma de actuar, la
persona que le facilitó la droga le había manipulado a través de la toxina que
no era otra que el “Viper” mejorado
que le había incautado al Dr. Burton. Si esa toxina es tan potente como para
manipular la conducta de alguien tendré que actuar antes de que cause más
problemas.
Tal y como había previsto todo el caso de Earle había afectado
a la reputación de mi compañía, Empresas Wayne. En la portada del Gotham
Gazette ya ponían en duda las prácticas de la empresa. Tuve que comparecer en
rueda de prensa como Bruce Wayne (mi álter ego) para calmar los ánimos. Por
suerte, mi discurso moralista sobre la empresa y el medio ambiente logró
apaciguar los ánimos y que todo volviese a la normalidad.
El
presente
Vaya, rememorar estas hazañas me ha hecho ponerme nostálgico,
hacía mucho tiempo que no recordaba
aquellos tiempos en los que todo era mejor, al menos para mí. Sobre todo
me ha hecho pensar en el Sr. Alfred
Pennyworth, mi mayordomo. Pese a que siempre fue mi sirviente realmente era
mi amigo, mi padre, mi confidente, mi hermano… La persona que más sacrificó por
mí y que más me quiso nunca. En fin, he acabado el primer capítulo de mis
memorias, quién me iba a decir que en mi estado iba a conseguir finalizar algo
que no fuera mi vida… supongo que a este
caballero oscuro aún le quedan muchas cosas que contar.
FIN

(1)
En esta parte he utilizado al juez Faden que era
corrupto en la película de Batman Begins. La prisión de Blackgate es la cárcel
de Gotham presente en la historia de Jeph Loeb de El largo Halloween, el
videojuego Batman Arkham Origins Blackgate, la serie animada Batman: The brave
and the bold… Los problemas con los residuos tóxicos han estado presentes a lo
largo de la historia del Caballero Oscuro, en los orígenes del Joker, en la
serie Gotham...
@greenlanternBCN